Godzilla x Kong: The New Empire
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Quiero aclarar que lo que estoy a punto de decir (¿escribir...?) no busca de ninguna manera demeritar a Adam Wingard personalmente ni como cineasta. Pero, la próxima vez, ¿puedes arruinar el personaje favorito de alguien más?
Esta nueva entrega trae de regreso a Kong tratando de sobrevivir y encontrar más como él en la Tierra Hueca, mientras que Godzilla combate amenazas en la superficie. Sin embargo, cuando una señal de auxilio electromagnética se presenta al momento en que se descubre una nueva área escondida en el subsuelo, la Dra. Andrews (Rebecca Hall), Bernie (Brian Tyree Henry), Jia (Kaylee Hottle) y Trapper (Dan Stevens), un personaje extravagante que funciona como veterinario de Kong y se infiere tuvo algo que ver con Andrews, parten a la Tierra Hueca para investigar esta aparente amenaza, la cual solo podrá ser detenida por este par de kaijus.
Nada en esta película funciona. Godzilla vs Kong (2021) ya era la cinta más apresurada, expositiva verbalmente, sin desarrollo de personajes y llena de violencia vacía entre cosas de CGI, pero con Godzilla x Kong: The New Empire Wingard lo lleva a otro nivel. Lo único que se puede decir da en el clavo de esta cinta son un par de planos llamativos e inteligentes en su encuadre y movimientos de cámara, a la vez que la iconografía y propiedad intelectual previamente existente es ridículamente disfrutable de ver. El solo ver a este Godzilla y Kong con un gran presupuesto de Hollywood es algo maravilloso. Lamentablemente, ahí se acaba lo bueno.
Los personajes son planos y sin personalidad, y los supuestos arcos son postisos. Ninguno tiene motivación y la mayor parte del tiempo su único propósito es escupir exposición para evitar cualquier sensación de misterio o tensión que pudiera generar esta cinta. Es vergonzoso ver a Hall esforzarse en esta película, pues no logra levantar un guion mediocre y solo hace a ver a sus compañeros de reparto como novatos en la actuación.
Aún así, muchos han argumentado que esta no es una razón válida para criticar esta cinta, la cual está hecha para ser entretenimiento vacío por dos horas. Pese a que esta idea me parece una demeritación del potencial del cine y de estos personajes, siempre estoy dispuesto a disfrutar una película donde monstruos gigantes se peleen y destruyan ciudades por el simple hecho de hacerlo. No obstante, Godzilla x Kong: The New Empire ni siquiera consigue esto.
Es groseramente carente de personalidad. La propuesta de cámara y dirección, con un par de excepciones, es genérica. Simplemente pone la cámara a grabar lo que está pasando, sin buscar que genere alguna emoción. Hay momentos en los que se podría causar tensión, otros asombro, otros terror y otros hasta una maravillosidad lovecraftiana (como ya demostró Dougherty con estos personajes cinco años atrás), y parece que Wingard huye de esto en favor de la escena más plana y menos emocional posible. Además, el error más garrafal de este filme es que su premisa se sostiene en que son monstruos gigantes, y por alguna razón nunca hay sensación de escala. O la destrucción nunca se ve desde altura humana, o ya directamente situan toda la película en un entorno ficticio de CGI. Esto llega a un punto tan mediocre que no hay un solo plano en la cinta donde Godzilla se vea mínimamente imponente.
En parte esto también es culpa del guion, que no situa la acción en lugares con escalas conocidas o que no se esfuerza en poner a los protagonistas humanos en peligro en media batalla entre titanes.
Aún así, es lastimoso ver cómo el guion y el montaje se aliaron para hacer tan excesivamente rápido el ritmo de la película que nada puede tener impacto. Las cosas simplemente pasan, sin ninguna motivación y porque la cinta tiene que avanzar, y mientras más rápido para tratar de evitar que el espectador piense, mejor. Cualquier situación se resuelve inmediatamente, los obstaculos y complicaciones son risibles, la tensión se corta inmediatamente y las escenas "emocionales" no pueden ni respirar. Es abrumador como todo avanza tan velozmente que, destacando la secuencia de créditos iniciales, en momentos es imposible seguirle el paso a lo que está ocurriendo.
Al final, es un desperdicio de propiedades intelectuales muy valiosas. El guion no sabe crear una historia competente, la dirección no es capaz siquiera de proveer momentos efectivos en cualquier nivel, y elementos como el diseño de producción o la música pasan completamente desapercibidos. Es una pena que, después de criaturas de gran escala y sensaciones casi lovecraftianas, batallas épicas, iconografía brutal y música memorable, ahora solo queden renders de CGI golpeandose sin razón o impacto.
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